Era una vez un gato que iba andando, se encontró un gallo que le dio un buen susto. Del susto el gato cayó a un barranco. Entonces un bombero gato lo rescató con una larga cuerda. El gallo arrepentido pidió perdón al gato y el gato le dio las gracias al bombero gato, y todos fueron amigos.
qué lindo cuento Alberto!
ResponderEliminarMarcela